La música en si es un arte, que está compuesta por una cantidad de organización lo cual al hacerlo, se resalta como algo lógico, coherente, y satisfactorio al escucharlo. La música es considerada como una educación espiritual por ello al crearla debemos tomar en cuenta estos tres elementos muy importantes para crearla.
Lo que hace que la música sea profesional y en todos los casos deberá ser única y especial, que logrará estimular el oído de los oyentes cambiando la percepción totalmente del ser humano incluso hasta el mundo, la música está hecha para expresar libremente algún sentimiento o alguna idea. En el momento de escuchar una melodía todo el cuerpo comienza a vibrar que modifica altamente tu presión, enviando por el aire, y que es atraído hasta tus oídos captando la información que este desea.
La música en definitiva es combinar la melodía junto al silencio con el fin de obtener una armonía, junto a una variación de altura, timbre, intensidad, y duración. Todas las personas utilizan esto como un incentivo para hacer las cosas tan simples como limpiar, cocinar, pintar o hacer ejercicio gracias a que nos llenan de energía y mucho optimismo.
La música como medicina
Como todos saben la música acompaña a los rituales y a las ceremonias, lo que desarrolla una sanación corporal y cerebral, en terapias utilizadas como la cosmología y la mitología se puede encontrar un vínculo importante espiritual mientras estas en la tierra.
Su historia comienza cuando en la antigua Grecia un hombre llamado Apolo obtuvo el sobrenombre del dios de la música junto a la sanación, los griegos obtuvieron la idea de que el sonido es una ciencia altamente desarrollada para la curación.
Esta resulta efecto cuando la música entra por los oídos, y comienzan los huesos para actuar en forma instrumental con el fin de afinar los campos neurológicos, sintiendo así vibraciones que pueden reflejarse a través del cuerpo produciendo entonces efectos curativos.
Beneficios curativos atravesó de la música
Estudios recientemente realizados confirmaron que la melodía consigue respuestas autónomas de la persona, mientras que las notas agudas hacen que la presión se altere mientras que las notas graves reducen significantemente la presión.
La música puede alterar tus pulsaciones entre 80-90 hasta 40-60 pulsaciones por segundo, perfecto para aquellos que tienen problemas cardiacos.
Uno de los beneficios de la música es que ayuda a despertar muchos sentimientos, como lo son la alegría, tristeza, ira y muchos más, método utilizado para las terapias de parejas y familiares.